Se trata de un anuncio del libro de Steven Johnson, pero su contenido es realmente interesante, y resalta la relevancia que tiene la conectividad (las oportunidades crecientes de interacción y comunicación) en los procesos creativos y de innovación.
Saber Escuchar
Ese es el primer proceso: el de escucharme, tomar conciencia y registrar los movimientos de mis pensamientos, sensaciones y emociones. A partir de allí, puedo avanzar hacia una segunda fase: abrir mi percepción a todo lo que me rodea, especialmente hacia mis interlocutores. Entonces mi percepción se hace más sutil y profunda, ofreciéndome información suficiente para adaptarme constantemente a condiciones cambiantes, para hacer llegar mejor la información que estoy transmitiendo.Los Hábitos de la Felicidad
Sencilla y profunda presentación, desarrollada con fluidez y que ofrece claves claras sobre uno de los elementos que mejor permite el fluir de nuestras comunicaciones: la neutralidad, que Matthieu Ricard aborda como entrenamiento de la mente a través de la meditación.
Introducción al Psicodrama
Teatro Espontáneo
El teatro espontáneo es un proceso de creación colectiva, originado en Viena en la década de los 20, de la mano de J. L. Moreno, con el propósito de revitalizar la creatividad y fortalecer las relaciones y roles sociales. Consiste en la escenificación de situaciones que surgen espontáneamente, sin preparación previa; no hay dramaturgo ni actores en el sentido tradicional; todos los participantes cumplen con estos roles siendo a la vez dramaturgos, intérpretes escénicos y narradores.
“Consiste, básicamente, en la narración de historias a cargo de las personas que asisten a la función. Las historias son representadas, en el mismo momento, por un grupo de actores entrenados, incluyendo la improvisación, la música y la danza. Esos lugares luego pueden ser ocupados por miembros de la audiencia que quieran actuar las historias narradas”. (Garavelli, 2003)
Un grupo de personas se encuentra en un espacio cualquiera, para compartir y representar sus propias historias. Una primera mirada sobre el Teatro Espontáneo nos permite percibirlo como un ritual, donde la improvisación es su característica esencial, para poder generar una experiencia vital y orgánica. Los participantes se relacionan a través de la palabra hablada, el movimiento corporal, los sonidos y la música, para recrear historias compartidas en su íntima subjetividad.
En el Teatro Espontáneo existen técnicas concretas, normas de funcionamiento y un marco conceptual relativo a la condición del ser humano y al trabajo grupal, que tienen como propósito recuperar nuestras historias.
“Su objetivo es el de recuperar al sujeto protagonista de su historia, crear un posicionamiento crítico frente a modelos impuestos, recuperar el lazo social perdido, crear un espacio de resistencia cultural mediante la pertenencia a un conjunto creativo”. (Argurete, 2009)
La premisa detrás de la práctica del teatro espontáneo es la necesidad de recuperar la memoria humana en los niveles individual, grupal y social, considerando que la evolución de los medios masivos de difusión de información y los avances tecnológicos han producido una dislocación en las imágenes y registros colectivos, así como los desplazamientos sociales, las migraciones, los conflictos multinacionales han tenido impacto negativo profundo en el sentido de pertenencia, los valores culturales y el desarrollo humano.
Se ha convertido en un desafío para nosotros, hombres y mujeres de este tiempo, darle sentido a nuestras particulares experiencias. Estamos constantemente inundados por imágenes prefabricadas e inconexas que nos intoxican con fantasías irrealizables. Estereotipos, ideas distorsionadas en torno al éxito o al fracaso, se constituyen en afectadas e hipertrofiadas aproximaciones a la realidad.
El Teatro de la Espontaneidad puede constituir espacios para recuperar la experiencia de creación, en un acto colectivo que fortalece los vínculos entre los participantes y de estos con su propia experiencia y particulares visiones.
“Su objetivo último es la creación de un hecho estético, un acto de resistencia a la cultura impuesta, una provocación a una existencia conformista, un intento terapéutico de lo colectivo, una incursión por nuestra improvisación creativa, el placer infinito de escuchar historias al uso de nuestra infancia, cuando nos ayudaban a dormir conjurando todos los miedos”. (Argurete, 2009)
Desde su creación, la técnica del Teatro Espontáneo tiene como uno de sus propósitos recobrar la vigencia del trabajo escénico como vía de relación dinámica entre los seres humanos, como forma de reconexión entre aquello vital a la experiencia subjetiva (imágenes, sueños, deseos, temores, impulsos) y los factores socioculturales, históricos, elementos colectivos que afectan y son a su vez afectados por los hombres en su individualidad.
Según lo relata su creador J.L.Moreno, el Teatro Espontáneo “se convirtió en un lugar de reunión de los descontentos y los rebeldes, la cuna de la revolución creadora entre 1922 y 1925”. Y de allí, de esos años de experimentación y práctica, surgen las bases del trabajo con la improvisación escénica, la espontaneidad, vinculadas a técnicas dramáticas para el aprendizaje de roles, así como la psicoterapia de grupo y la terapéutica de representaciones espontáneas.
Actualmente, una sesión de teatro espontáneo posee una estructura concreta para su realización. La característica esencial sigue siendo la misma como punto de partida: no hay libreto o texto preconcebido; la compañía de actores y actrices han trabajado previamente improvisando distintos roles, los músicos ensayan tonalidades diversas para mejorar su nivel de acoplamiento, el director guía las improvisaciones.
El público es el portador de las historias que serán representadas. Uno de sus integrantes, voluntariamente, comparte una historia con todos los que allí se han congregado, permite el acceso a un relato de su memoria personal. Casi simultáneamente, la acción escénica comienza a desarrollarse, combinando la presencia de intérpretes de la compañía teatral con aquellos de la audiencia que han decidido pasar al espacio y apoyar la representación. Los músicos generan la ambientación adecuada para cada escena, y progresivamente la historia cobra vida propia, a veces yendo más lejos, mostrando detalles que el narrador no había comentado, revelando nuevas alternativas de acción, revitalizando cada acto al conectar pasado y presente vivo.
La propuesta de los Teatros de la Memoria, desarrollada en Argentina por el Dr. Gustavo J. Aruguete , es una referencia de la vigencia que en nuestros tiempos tiene este tipo de prácticas. La iniciativa del llamado Teatro de la Memoria, que sigue siendo una manifestación del teatro espontáneo, responde al aislamiento que vive el individuo en la ciudad contemporánea, con un debilitamiento evidente de los lazos sociales y de la solidaridad, dificultades para reconocerse en su coetáneo y mucho menos de afirmarse en una individualidad vinculante y dinámica.
Frente a un sujeto y un colectivo sin historia, que ha entrado en un movimiento frenético de inmediatez y superficialidad, se coloca la práctica de este tipo de teatro como una alternativa que recupera el valor del diálogo y la creatividad humanas, que promueve la reelaboración de lo intersubjetivo como posibilidad generadora de alternativas ante los desafíos del presente.
El Teatro Espontáneo permite “reconstruir el pasado y dar significados al presente” , juego de creación que consiente volver a mirar desde distintos lugares la realidad, renovando así la facultad que el individuo tiene de darle algún sentido o significado.
Una típica sesión de Teatro de la Espontaneidad se desarrolla así:
1. Presentación a la audiencia del método de trabajo creativo que se realizará, así como los roles relativos al mismo: audiencia, actores, director, etc.
2. Realización de juegos dramáticos a modo de caldeamiento o preparación para el trabajo posterior.
3. Narración de relatos por parte de la audiencia, selección de algunos sucesos a ser representados.
4. Desarrollo escénico del o los relatos seleccionados, transformados ahora en dramaturgia, con la participación de personas del público y otros actores de la compañía.
5. Combinación de escenas reales con otras provenientes de las fantasías de los presentes, acontecimientos simbólicos, nuevos personajes que no necesariamente estaban en los relatos originales. Multiplicación dramática de imágenes que facilitan la interconexión de aspectos de las historias que ya se han manifestado.
6. Diálogo de todos los presentes, con respecto a la experiencia compartida y las resonancias que en su mundo subjetivo han tenido.
Como ha podido notarse, el Teatro de la Espontaneidad, siendo la base del trabajo de J.L.Moreno, nos ofrece un instrumental de trabajo creativo y escénico, además de una amplia perspectiva sobre el rol del sujeto y del grupo en la dinámica de recuperación su historia e identidad, y en la generación de respuestas ante los retos de nuestro tiempo.
Elementos Básicos de Análisis del Discurso
Analizar alocuciones de otros, sobre el papel, es una práctica que permite conocer ciertas técnicas y desarrollar destrezas para la creación y estructuración del discurso. Un ejercicio sumamente enriquecedor es tomar el discurso e identificar lo que se explica a continuación:
– Primero: todo texto o discurso posee una estructura interna, desplegada a partir de una idea central y un conjunto de ideas secundarias y de soporte, que buscan tanto reiterar los aspectos más importantes del tema, como servir de soporte a aquello que se está presentando.
– Esta idea principal está asociada a un objetivo concreto del acto de comunicación, que generalmente será impactar, conmover o persuadir a la audiencia. Incluso cuando se realizan presentaciones de tipo informativo, hay una cierta intención persuasiva (por ejemplo, cuando presentamos un informe de gestión en nuestro trabajo, queremos dar una impresión de eficiencia, queremos convencer a nuestros interlocutores sobre la calidad de los datos presentados y de nuestra gestión).
– Hay ideas o elementos del discurso que buscan comprobar o servir de base para la idea principal que se presenta, es decir, convertir esa idea en una verdad, a través de estudios, estadísticas resultado de encuestas, casos anteriores que demuestren una tendencia, etc.
– Es importante identificar como elemento fundamental la intención del orador o de quien compuso el discurso, que va estrechamente asociado al objetivo específico del discurso. Cuando componemos nosotros nuestro discurso, estos son dos aspectos esenciales también.
– Otros elementos relevantes: identificar el contexto, la circunstancia y la audiencia a la cual ese discurso se está dirigiendo. Como puede inferirse fácilmente, cuando estamos nosotros preparando nuestro discurso, estos tres elementos deben ser considerados: (a) Audiencia, (b) Contexto y (c) Circunstancia.
– Luego, al revisar el texto, marcamos las palabras de difícil pronunciación, complejas o en exceso delicadas (significativas en algún nivel), para saber que debemos tener cuidado al expresarlas. Si son nombres propios, títulos o denominaciones poco comunes, se sugiere pronunciarlas con detenimiento.
- Otro elemento a identificar son las frases y las palabras claves, que expresan la idea central o las ideas secundarias (o de apoyo), pues ellas tendrán especial importancia en nuestra presentación.
- Las frases colocadas allí para contactar a la audiencia, generar reflexión o producir imágenes en ella.
- Las frases generadas como transición entre una idea y otra.
– Todo ello irá descubriéndonos la estructura del texto, lo que nos permitirá encontrar el ritmo adecuado, las pausas que necesitamos hacer, las entonaciones pertinentes para impactar con las ideas que estamos presentando. Cada uno de estos elementos pueden y deben ser integrados en nuestros discursos cuando los diseñamos.
– Finalmente, hay tres aspectos importantes a considerar cuando diseñamos y luego al presentar el discurso: (1) Ethos, es aquello que es considerado de valor socialmente o en el contexto donde nos desenvolvemos; (2) Pathos, consiste en la dimensión emocional y la conexión que podemos lograr a través de imágenes y énfasis; (3) Logos, la estructura lógica de nuestro discurso.
Si se realiza una revisión detallada de cada uno de estos elementos, no solamente se descubrirá la estructura interna del discurso, sino que nos facilitará la valoración de esa pieza de comunicación, permiténdonos ver su coherencia y el peso de las distintas dimensiones de ese material como contenido. A partir de esos elementos será más fácil diseñar estrategias de presentación de la información.
Sugerencia para la lectura de textos en voz alta
Algunas recomendaciones sencillas cuando toca enfrentarse a un texto.
Realicé esta revisión de aspectos básicos junto a un grupo de estudiantes de Comunicación Oral, durante prácticas que realizaron en estudio de radio. Les tocó, por primera vez, enfrentarse a textos relativamente extensos, y estas fueron las dificultades más comunes:
– Se trababan en secciones específicas, al decir cifras, al abordar palabras relativamente complejas o de difícil pronunciación. Cuando llegaban a ese punto solían tartamudear o cortar lo que les tocaba leer.
– A medida que avanzaban en la lectura sucedía que parecían sentirse presionados por terminar, entonces aumentaban el ritmo innecesariamente lo que afectaba la claridad de su dicción, o leían con entonaciones inadecuadas (exageradas o, en otros casos, planas), perdiéndose el sentido de lo que decían.
– Otros iban cansándose, disminuían considerablemente la energía y fallaba la proyección de voz.
– Un desafío adicional fue la administración de la respiración. Repetidamente se quedaban sin aire, forzando el final de las frases que emergían casi imperceptiblemente, y haciendo pausas en medio de frases cuyo sentido requería una lectura más continua o fluida.
– Les costaba controlar la proyección y el volumen de la voz, de modo que en secciones podían llegar a gritar y en otras a susurrar sin objetivo alguno. También ocurría que se sentía el golpe de aire en el micrófono.
Estos desafíos se presentan con frecuencia, sobre todo a quienes se están iniciando en el manejo de sus recursos expresivos. En el suceder de una grabación radial, siguiendo un guión concreto, se hacen más evidentes, porque sólo tenemos nuestra voz y la intención que logramos darle a lo que leemos a través de ella, nada más.
Por eso para cada uno de estos aspectos compartimos las siguientes recomendaciones:
– Apenas tengamos el texto en la mano, tomarse unos minutos para revisarlo, hacer una primera lectura antes de ir al aire y marcar en nuestro guión todo lo que podría ser una dificultad al momento de decirlo. Prestar atención a las cifras, a los nombres o denominaciones complicadas, palabras compuestas o más extensas de lo habitual, o aquellos términos que no forman parte del vocabulario que manejamos cotidianamente. Se sugiere colocar alguna señal sobre el papel para saber que están allí y poder leerlas con mayor cuidado y precisión.
– También se sugiere marcar las pausas, los cambios de ritmo, los lugares de énfasis, todo lo cual puede servir de apoyo para mantener alta la energía, para sostener el texto que se está presentando.
– No presionar el ritmo. Depende de lo que se esté diciendo, del contexto, de las necesidades presentes, del tiempo disponible, será necesario un ritmo más pausado o más acelerado, pero debe ser dado sin presiones, sin tensiones innecesarias. Evitar sentir que debe terminarse lo antes posible, más bien darle el peso y tempo adecuado a cada palabra, a cada frase.
– Mantenerse en conexión con aquello que se lee, lo más importante es el mensaje que se está transmitiendo en ese momento.
– Como se trata de leer un guión o un texto, pueden utilizarse los signos de puntuación como marcas de pausas en las cuáles puedo inhalar, para continuar posteriormente. Tomar el aire con calma, e ir trabajando en lograr una relación entre el ritmo de la respiración y el ritmo de lectura, para que exista fluidez en la presentación de la información.
– Igualmente estar atentos al volumen y la proyección de la voz. Esto se entrena tanto escuchándose después de haber concluido de la grabación e identificar las variaciones inadecuadas, como estando muy atentos a lo que hago físicamente mientras leo en voz alta: cuando inhalo, cuando exhalo, cuando emito sonido.
Finalmente señalar que es importante no desconectarnos de lo que estamos leyendo o diciendo. Generalmente, si tiene sentido para nosotros, lo tendrá para el escucha.
Espero que estas sugerencias básicas les sean de utilidad.
Comunicarnos: Visión y Compromiso
Tim Brown sobre «Creatividad y juego»
http://www.ted.com/talks/lang/spa/tim_brown_on_creativity_and_play.html
Siguiendo el link llegarán al video de la presnetación de Tim Brown, donde realiza diversas actividades con la audiencia y usa muy buenos ejemplos de como el juego es clave para impulsar la creatividad en los equipos de trabajo.

















