Gracias al apoyo del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), venimos desarrollando este trabajo con la implementación de técnicas del psicodrama para el fortalecimiento de la resiliencia personal en personas solicitantes de refugio.
A través del trabajo espontáneo y de impulso a la creatividad, cada persona participante ha generado aprendizajes para la gestión de sus emociones, la revisión de los desafíos o bloqueos internos existentes, el abordaje de eventos de quiebre y la creación de nuevas narrativas en conexión con sus habilidades individuales. En este proceso, el grupo se ha fortalecido en la solidaridad y en la posibilidad de cambiar de perspectiva, para avanzar hacia el autoconocimiento y la resiliencia.