Coaching

Las circunstancias para que una persona decida iniciar un coaching pueden ser muy diversas: un quiebre personal, resolver un conflicto interpersonal o alcanzar un objetivo profesional. El objetivo estará puesto siempre en abrir posibilidades de acción y que la persona que es coacheada (coachee) asuma el poder que está en sus manos. Esa respuesta nueva o diferente también será consecuencia de una transformación personal.

Leonardo wolk en coaching el arte de soplar brasas

En el proceso de coaching se trabaja con lo visible, con la conciencia que opera sobre determinadas acciones y proyectos. El diálogo que se produce entre coach y cliente (coachee), facilita la reflexión sobre acontecimientos, el reconocimiento de lo que se percibe y se siente, el establecimiento de vías de acción frente a determinada tensión o conflicto, y la toma de decisiones con respecto a posibles acciones a realizar.

Coaching creativo e innovación social:
Se abren posibilidades, se impulsa el proceso creativo que nos transforma, al experimentar nuevas perspectivas, formas inéditas de percibir la realidad.

En la interacción dentro de la sesión, el cliente experimenta una escucha dedicada y respetuosa, libre de juicios, que le da la libertad de reflexionar activamente sobre los temas o situaciones que propone.

El mundo es entendido como un espacio de posibilidades en el cual el lenguaje genera realidades. En otras palabras, se interesa por el modo particular de ser de las personas. Toma las distinciones de la ontología del lenguaje y opera -esencial, pero no excluyentemente- mediante herramientas conversacionales.

Leonardo wolk en coaching el arte de soplar brasas

Las palabras producen transformaciones, general realidades. En el coaching se desarrollan competencias de comunicación, especialmente la escucha y la expresión, en un espacio de acompañamiento sostenido que posibilita el cambio de actitud y la identificación (o creación) de posibilidades.